La pasada tarde noche de Viernes, se inauguró en la Hermandad el salón dedicado a nuestro querido y nunca olvidado Hermano Mayor Perpetuo Don Antonio Jiménez Tamayo.
Fue un acto sencillo en el que el Hermano Mayor dedicó elogios a la figura de D. Antonio y sus hijos, también ensalzaron su labor y calidad humana, algunos hermanos como José Castaño, el Hermano Fernando y el también hermano y Delegado Diocesano Joaquín Perea.
Tras la bendición y retirada de la cortina de la placa conmemorativa, Andrés y Manolo Jiménez escoltados por la totalidad de su familia y amigos cercanos dedicaron unas emotivas y sinceras palabras de recuerdo y agradecimiento a la figura de su padre y de su querida hermandad.
Finalmente pudimos disfrutar de una agradable velada de convivencia haciendo aún más fuerte los lazos de unión entre la familia nazarena.
P.D. Os adjuntamos una carta que le leyó nuestro antiguo Hermano Mayor José Castaño a su apreciado Antonio Jiménez:
SEMILLA NAZARENA
Carta a Antonio Jiménez Tamayo
Querido Antonio:
Con motivo de la acertada decisión de esta Junta de Gobierno de dedicarte esta
Salavde la Hermandad , a la cual debemos felicitar, he querido escribirte esta el
día de su inuguración evocando tus imborrables recuerdos.
No hay duda que contribuyen a tus inolvidables testimonios de tu vida entregada
totalmente a nuestra Hermandad la buena semilla nazarena que plantaron tu y
nuestra querida Rosa en tus hijos y estos en tus nietos. En ellos han germinados
vuestros grandes amores y devociones por Nuestro Padre Jesús Nazareno.
Ellos son y serán los continuadores de los muchos e inigualables ejemplos de
entrega y celo durante toda tu vida velando por los intereses de nuestra
Hermandad sin ninguna queja y siempre dispuesto con la gran bondad que
atesoraba a que en la vida interior de la misma nunca existiese diferencias
entre los hermanos.
Estoy seguro que desde que llegaste a la tesorería celestial, Jesús sabiendo
lo puntilloso que eres para las cuentas, te habrá encargado de su
administración convencido que jamás le faltará un sestercio.
Tus grandes servicios durante tantos años en San Juan de Letrán han sido
premiados con una parcela en el paraiso donde continuamente como
hacias en la Capilla le enseñarás tu libro de cuentas donde apareceremos
los hermanos morosos en amor a Jesús y aquellos otros que mantienen
como tu hiciste una extraordinaria cuenta corriente devocional.
Lo más importante de tu acostumbrada y férrea administración en el cielo,
es que conociendote, aprovecharas los momentos en que presenta las
cuentas a Jesús para hablarle de todos nosotros y le pediras como era
tu costumbre, que vele por tu querida Hermandad.
Con ese convencimiento preñado de eterna gratitud, esta Junta de Gobierno
ha querido perpetúar aun más tus imborrables recuerdos, aunque
sinceramente creo, que cuando las futuras generaciones de hermanos lean
a la entrada del salón que desde hoy llevará tu nombre, no necesitarán
preguntar quién eras tu, porque la semilla nazarena que sembraste en tus hijos
y nietos estará continuamente germinando en el corazón de nuestra Hermandad.
Jerez, 1 de Junio de 2012
José Castaño Rubiales